Las cortinas antimoscas son tus mejores aliadas durante el verano. Son prácticas, duraderas y bonitas. Además, están disponibles en una variedad de acabados. Pueden fabricarse en diferentes materiales y son perfectas para cualquier lugar del hogar, ya sea la puerta de la cocina, una puerta que da al patio o incluso una habitación. La cortina antimoscas encuentra siempre su lugar. Aquí te presentamos todo lo que necesitas saber sobre estas cortinas: para qué se usan, qué tipos hay y cómo medirlas e instalarlas. Descubre esto y más, a continuación.
Contenidos:
¿Qué son y para qué sirven las cortinas antimoscas?
Se trata de un elemento decorativo que, a la vez, cumple una función protectora. Dada la gran variedad de colores y materiales, permite delimitar los espacios y se integra con el resto de los elementos. Las cortinas contra las moscas son versátiles y estéticas para el diseño de interiores. También son una forma de proteger las habitaciones contra los insectos molestos.
La clave está en su sistema de fibras superpuestas. Gracias a los espacios abiertos entre ellas, el aire puede fluir libremente. Al mismo tiempo, los espacios son tan pequeños como para que no pasen con facilidad los insectos voladores grandes.
¿Qué tipos de cortinas antimoscas hay en el mercado?
Dependen de la materia prima y los diseños. Dada la gran cantidad de combinaciones posibles, la cortina antimoscas encuentra su sitio ideal en una multitud de entornos. Tanto si se trata de exteriores como de interiores, su función protectora contra los insectos es muy valorada.
Materiales más comunes de una cortina antimoscas
Elegir el elemento de fabricación dependerá mucho de dónde estará ubicada. Si quieres cortinas antimoscas para exteriores, prueba con las siguientes opciones.
- PVC: Es uno de los derivados plásticos más resistentes y versátiles para las cortinas contras las moscas. Soportará sin problemas las heladas, lluvia y sol de la intemperie.
- Plástico: Si bien no es la alternativa más elegante, es accesible y soporta muy bien las inclemencias del ambiente.
Por el contrario, si prefieres colocar la cortina antimoscas en interiores, prueba los siguientes materiales con distinguidos y elegantes acabados.
- Madera: La vieja clásica y confiable. Es el material más noble empleado en interiorismo. Su variabilidad permite presentar las cortinas para las moscas en colores claros, oscuros y hasta rojizos. Asimismo, puede encontrarse en acabados lisos o con manchas o patrones específicos.
- Bambú: Es una de las maderas más sólidas conocidas por la humanidad. En una cortina antimoscas, soportará sin problemas los cambios de temperatura. Para las puertas interiores, tendrá un brillo elegante y distintivo.
- Aluminio: Es un material duro pero flexible y maleable. Es muy útil porque resulta eficaz para permitir el paso del aire y bloquear los insectos. Por último, compensa mucho el precio en relación a su calidad.
Diseños más habituales en la cortina antimoscas
Tú puedes crear tu propia cortina antimoscas a partir de las que hay en el mercado. Combina colores e incluso materiales para tener exactamente el diseño que buscas. Conoce algunos de los diseños más comunes.
- Cortinas para las moscas de tiras de plástico superpuestas: Pueden ser de PVC o plástico ordinario. Las primeras destacan por su fiabilidad, mientras que las segundas permiten el paso de la luz (como es de esperar, son menos duraderas que las de PVC).
- Cortinas de cadenas: Están fabricadas principalmente en aluminio, son fáciles de instalar y muy resistentes, sobre todo como cortinas en interiores.
- Cortinas de canutillos de madera: Son muy clásicas e ideales para separar espacios como la sala y la cocina. Según el tipo de madera, estas cortinas serán claras u oscuras.
¿Cómo se instala la cortina antimoscas?
Dado que suele fabricarse en materiales ligeros y resistentes, la instalación no supone grandes dificultades. De hecho, la mayoría de los fabricantes venden listas para colocarlas, lo que abarata los costes de instalación. Tendrás que seguir 4 pasos.
- Medir antes de comprar: Lo primero que harás será medir la altura y el ancho del lugar donde quieras instalarla. Mide la puerta desde el límite del marco hasta el suelo. El largo del metálico montante suele estar incluido en la altura que solicites, por lo que tu cortina antimoscas encajará a la perfección.
- Cortar: Ante la duda, siempre es mejor pedir unos 3 o 4 centímetros de más. Bastará con medir la cortina y recortar el sobrante.
- Nivelar y taladrar: Necesitarás un nivel y un taladro con una muesca pequeña. Te servirán para hacer dos agujeros a exactamente la misma altura. De lo contrario, la cortina antimoscas estará mal posicionada.
- Montar la cortina: Sírvete de los dos agujeros e instala el montante, que servirá de enganche para las tiras, cadenas o canutillos.
Tus próximas cortinas antimoscas serán espectaculares si tienes en cuenta estos consejos. Con la combinación adecuada de diseño y materiales, tendrás la elegancia y el confort propios de la cortina antimoscas. Protégete de los insectos voladores molestos y refréscate los días de verano gracias a este elemento decorativo y funcional a partes iguales.
Soy amante de la decoración y el DIY y me gusta estar al día de las últimas tendencias y novedades en el sector. Hablo acerca de las propuestas decorativas que se presentan como novedad cada temporada y que más llaman mi atención, nuevos productos, rewiews, rankings y comparativas. Fundé este blog en el año 2008 y aquí sigo, escribiendo con la misma ilusión y pasión que el primer día. ¿Nos seguimos? A mí también me encantará ser tu amiga en las distintas redes sociales.
